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Amigos de mi Blog, conozcan estas seis normas infalibles para que la factura de su vida resulte tan cara como un "infarto al miocardio":
¡ Cúmplanlas al pie de la letra !, ¡ pronto su corazón les dará una sorpresita !.
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PRIMERA NORMA:
Que tu trabajo sea antes que nada. Los asuntos personales como la pareja, familiares y amigos son siempre secundarios, incluyendo la mala costumbre de comer. Sugerencia: No comas en casa jamás, ¡ quita mucho tiempo !, compra papitas, pastelillos, frituras y cositas light.
Tienes que ser un hombre o mujer de "éxito"... aunque no lo disfrutes, tu lápida tendrá un gran mensaje conmovedor sin duda.
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SEGUNDA NORMA:
Recuerda: Jamás dejes para mañana lo que puedas hacer hoy... extiende tu jornada laboral, puedes conformarte con ver crecer a tus hijos en la cama. Ve a tu oficina los sábados por la tarde y en los días feriados para dejar todo al corriente. ¡ Nada de descanso, nada de platicar con tus seres queridos..! Espera así el anhelado infarto.
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TERCERA NORMA:
Por las noches descansa de ir a la oficina, es mejor que lleves el trabajo a casa, consíguete una lap-top y así, en cualquier lugar, incluso en el mismo W.C. Y mientras los demás duermen, también podrás trabajar a tus anchas.
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CUARTA NORMA:
Nunca digas NO a todo lo que te pidan que hagas. Intégrate a toda clase de Comités, Asociaciones, Consejos, Comisiones; ¡ vaya !, a todas las reuniones de "éxito”.
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QUINTA NORMA:
¡ Eres de acero !, no tomes vacaciones, ¡ ya las tomarás cuando te mueras ! El Cementerio es un buen hotel de reposo. Allí ya nadie te hará ruido.
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SEXTA NORMA:
Si tienes que viajar a causa de tu trabajo, claro está, esfuérzate todo el día, no pierdas tiempo saliendo a caminar o disfrutando de la piscina o la playa. Recuerda, eres el ‘Jefe’.
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Si cumples estas sencillas reglas a las que estás tan acostumbrado, pronto te llegará ese ‘infarto’ tan mentado y más vale que vayas pensando en un creativo epitafio para tu tumba, a la que solo algunos parientes y amigos de verdad irán algún día a orar por tu alma.
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Por mi parte, preferí nunca seguir estas ‘normas’, y desde hace varios años disfruto una merecida o inmerecida, pero grata jubilación, en casita, disfrutando a la familia y a mis buenas amistades.
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PRIMERA NORMA:
Que tu trabajo sea antes que nada. Los asuntos personales como la pareja, familiares y amigos son siempre secundarios, incluyendo la mala costumbre de comer. Sugerencia: No comas en casa jamás, ¡ quita mucho tiempo !, compra papitas, pastelillos, frituras y cositas light.
Tienes que ser un hombre o mujer de "éxito"... aunque no lo disfrutes, tu lápida tendrá un gran mensaje conmovedor sin duda.
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SEGUNDA NORMA:
Recuerda: Jamás dejes para mañana lo que puedas hacer hoy... extiende tu jornada laboral, puedes conformarte con ver crecer a tus hijos en la cama. Ve a tu oficina los sábados por la tarde y en los días feriados para dejar todo al corriente. ¡ Nada de descanso, nada de platicar con tus seres queridos..! Espera así el anhelado infarto.
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TERCERA NORMA:
Por las noches descansa de ir a la oficina, es mejor que lleves el trabajo a casa, consíguete una lap-top y así, en cualquier lugar, incluso en el mismo W.C. Y mientras los demás duermen, también podrás trabajar a tus anchas.
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CUARTA NORMA:
Nunca digas NO a todo lo que te pidan que hagas. Intégrate a toda clase de Comités, Asociaciones, Consejos, Comisiones; ¡ vaya !, a todas las reuniones de "éxito”.
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QUINTA NORMA:
¡ Eres de acero !, no tomes vacaciones, ¡ ya las tomarás cuando te mueras ! El Cementerio es un buen hotel de reposo. Allí ya nadie te hará ruido.
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SEXTA NORMA:
Si tienes que viajar a causa de tu trabajo, claro está, esfuérzate todo el día, no pierdas tiempo saliendo a caminar o disfrutando de la piscina o la playa. Recuerda, eres el ‘Jefe’.
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Si cumples estas sencillas reglas a las que estás tan acostumbrado, pronto te llegará ese ‘infarto’ tan mentado y más vale que vayas pensando en un creativo epitafio para tu tumba, a la que solo algunos parientes y amigos de verdad irán algún día a orar por tu alma.
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Por mi parte, preferí nunca seguir estas ‘normas’, y desde hace varios años disfruto una merecida o inmerecida, pero grata jubilación, en casita, disfrutando a la familia y a mis buenas amistades.
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ALF, el ‘tapatío’, desde su dulce hogar en Zapopan, Jal. (México), con un gran aprecio para todos Ustedes.
ALF, el ‘tapatío’, desde su dulce hogar en Zapopan, Jal. (México), con un gran aprecio para todos Ustedes.
2 comentarios:
Un muy triste recuerdo lleno de cariño para quién en vida fuera mi 'Hermano Oriental' como afectuosamente me llamaba el buen Saúl C., que el pasado domingo por la noche dejó este mundo y se fue a gozar de la Eternidad, desde su siempre adorada Patria del Uruguay.
Doy mi más sentido pésame a su Esposa y familiares, y espero su pronta resignación en Cristo.
Ningún 'comentario'; de seguro no les importó el tema por no ser ni por asomo, de esos extremistas trabajadores que prefieren dedicarse como locos a la chamba, y ni se acuerdan de lo fabuloso que es el descanso y la diversión.
Da ser así, los felicito, pero si se toman la molestia de leer estos segmentos de mi Blog, pónganme al menos un saludito o una trompetilla si no les agradó. ja, ja, ja.
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